Miriam Camponovo, presidenta de la Biblioteca Popular Sarmiento, en diálogo con Radio Provincia, se refirió a los graves inconvenientes que se encuentran atravesando por la falta de pago de los subsidios que les debe abonar el Gobierno de la provincia. Mencionó que “la verdad es que la situación es aterradora para nosotros, estamos a cargo de la biblioteca, uno pasa la noche sin dormir, sin saber para donde salir. Es angustiante ir a los despachos, intentar hablar con el gobernador (Gustavo Melella), recorrer el Ministerio de Educación, la Secretaría de Cultura, pero no hay respuestas y la verdad que es triste”, expresó.
Dijo la presidenta de la biblioteca que, en esa búsqueda, “no encontrás a los funcionarios, no encontrás a los responsables. Eso es tremendo, no hay llegada; la verdad es que de la gente de planta no se puede decir nada. Por ejemplo, los chicos de Tesorería nos decían: tienen que ir al Ministerio de Educación y conseguir que la ministra (Analía Cubino) ponga ese expediente en prioridad de pago. Dije, bueno, pero no encontramos a la ministra de Educación, y como digo es una situación angustiante”, reiteró Camponovo.
Después mencionó que pudieron “pagarle al señor de la caldera por un apoyo que recibimos de los socios, pero eso es momentáneo. Tenemos que seguir consiguiendo el subsidio que corresponde, porque no estamos pidiendo nada que no corresponda. Hoy, la entrada segura que tenemos, el ingreso seguro que tiene la biblioteca, es el de los socios que pagan con tarjeta que es de 68.000 pesos. Porque los otros subsidios, ya sea de Gobierno provincial o de la CONABIP (Comisión Nacional de Bibliotecas Populares) o del municipio, no tienen una fecha segura de ingreso. Imagínate que los gastos fijos de la biblioteca, en julio, fueron de 190.000 pesos. Con todo esto de la inflación los costos también crecieron y así no hay cuenta que cierre”, indicó.
La presidenta de la Biblioteca Popular aclaró que el atraso en el pago es específicamente del subsidio que les otorgó el Gobierno de la provincia, no así del que les entrega la Municipalidad de Ushuaia, destacando además que “el subsidio que tenemos del municipio son unos 125 mil pesos. Imagínate que los gastos fijos son de 190 mil y el balance que vamos a aprobar el viernes nos salió 150 mil pesos; de los cuales hasta ahora pagamos la mitad”, señaló.
Refiriéndose al supuesto acompañamiento desde algunos sectores, para las bibliotecas populares, aseguró que “todo es relato, todo nada es acción, todo es relato para los medios, nada se concreta. En rasgos generales es así, es lamentable. Estamos reclamando este expediente que es el 4434 y hay otro que comenzó a surgir que es el 3581, también de 2023. Pero lo que quiero decir es que también es que de 2023, por supuesto que no hemos recibido ninguno, pero es que si no cobramos ese del año pasado, tampoco podemos cobrar estos porque hay que rendir uno para poder comenzar con el otro perdido. Entonces es un círculo vicioso”, manifestó, respecto de la deuda que se va acumulando.
Miriam Camponovo contó que, este viernes a las 18 horas, tendrán la asamblea ordinaria “para aprobar el balance 2022 y a las 18:30 una asamblea extraordinaria, para tratar el aumento de las cuotas societarias y otros temas. Tenemos cuotas individuales, que las vamos a aumentar a 100 pesos y la familiar a 200 y siempre, sin perder de vista esta función que tiene la biblioteca popular de que todo el mundo pueda acceder, vamos a seguir manteniendo una cuota baja. Pero también quiero decir que están las cuotas plus, que van a ser de 500, de 1000, de 1500 y 2000 pesos, para que aquellos que puedan acceder a eso, aquellos socios y aquellos amigos de la biblioteca que se quieran asociar, les pedimos por favor que lo hagan con la cuota plus y por tarjeta de crédito, porque vuelvo a reiterar que el único ingreso seguro que tenemos”, remarcó.
Para concluir, manifestó que “también tenemos que recordar que el Estado tiene que brindar un servicio de biblioteca pública, que hoy no lo está haciendo. El Estado no tiene bibliotecas públicas y esa función la están cumpliendo las bibliotecas populares. Así que fíjate cuánto se ahorra también el Estado, en no poner en funcionamiento la biblioteca pública como debería y por qué no apoyar un poquito más a las bibliotecas populares y poder llevar adelante esa función como corresponde”, concluyó la presidenta de la Biblioteca Popular Sarmiento.