“La resistencia está empezando en esta querida Tierra del Fuego”, lanzó Furlán ante una multitud de trabajadores y trabajadoras que se congregaron para rechazar las políticas del Gobierno Nacional. “No vine a estar en un lugar de confort. Esta es una batalla central. Nos está mirando la Argentina”, aseguró.
El dirigente nacional valoró la convocatoria en Ushuaia y Río Grande y señaló que el momento exige superar diferencias y enfocarse en las coincidencias: “Tenemos que discutir qué modelo de desarrollo queremos para dignificar a nuestro pueblo. El enemigo busca someternos desunidos. Pero somos mayoría y tenemos poder si estamos unidos”.
Con dureza, criticó el discurso oficial sobre el precio de los celulares y recordó el antecedente del 2017: “Ya nos mintieron con las netbooks. Nos prometieron tecnología barata y se perdieron 5.000 puestos de trabajo. Hoy quieren repetir la historia”.
También cruzó a quienes atacan visualmente al entramado fabril: “Algunos dicen que estos galpones afean el paisaje. No saben que aquí anidan sueños y proyectos de vida de miles de familias fueguinas”.
Furlán anticipó que el próximo miércoles convocará en Río Grande a los 54 secretarios generales de la UOM del país “para sesionar y multiplicar el compromiso, pero no con palabras, poniéndole el cuerpo”.
El cierre de su mensaje fue una advertencia potente: “Mientras en Argentina quieren destruir el régimen fueguino, en el sur de Chile piden uno similar. Nos toman por tontos. En el mundo, la disputa es por el trabajo calificado. Y acá, lo estamos regalando”.
Fuente y foto: Red23 Noticias