Claudia González, del Centro Integral de Kinesiología y Rehabilitación Ushuaia (CIKRU), en diálogo con Radio Provincia se refirió a la compleja situación que atraviesan, mencionando que resolvieron “cortar las prestaciones o el crédito a la obra social de OSEF. Nosotros somos un centro de kinesiología y rehabilitación neurológica y tengo dos edificios, una sede donde hacemos mucha traumatología y otra sede, dónde se hace todo lo que es neurorrehabilitación. De ese lugar vence, en el próximo tiempo, el alquiler y me es imposible renovarlo. No solamente porque no tengo la plata, sino que no lo puedo renovar porque no tengo estabilidad de cobro”, mencionó, refiriéndose a la deuda que la OSEF mantiene con ellos.
Después indicó que tienen “60 pacientes, que son pacientes de rehabilitación neurológica. Con ACV, pacientes que forman la parte y el estrato más vulnerable de la sociedad y que son pacientes crónicos, a quienes no reciben en otros lugares y bueno que quedan sin atención”. Respecto de la situación con la obra social, comentó que “el último mes que cobré fue agosto, es decir que desde septiembre a esta parte se fueron dando cada vez más atrasos en los pagos y bueno, ahora tenemos todos estos meses encima”.
“Aparte, tengo 10 profesionales con los cuales ayer hablaba y que en realidad apostaron, profesionales que son kinesiólogos, que son fonoaudiólogos, que son psicólogos, que son terapistas ocupacionales, que han apostado fuerte a trabajar en neurología. Lo hacen bien, se han capacitado y yo les tengo que decir que se acabó y se acabó, cuando en realidad somos un gran respaldo de la sociedad. Inclusive aún más, si siguen adelante con la rehabilitación aguda y subaguda, porque nosotros somos un área privada que estamos sosteniendo un poco toda esa área pública que hay y que recibimos a esos pacientes, y que continuamos con esos pacientes”, remarcó González.
De las personas que se encuentran atendiendo, indicó que “La mayoría, porque ayer lo estábamos mirando con la secretaria, son de OSEF. Yo tengo un total de, más o menos en promedio, 60 pacientes, de los cuales 48 tienen Certificado Único de Discapacidad y pertenecen a la obra social OSEF”, señaló la responsable del CIKRU.
Por la deuda, dijo que se acerca “a la obra social todos los días, mando mensajes para la presidencia, para la vicepresidencia, para que puedan solucionarme y decirme algo. No tenemos costos grandes, pero evidentemente no funciona. La verdad es que no sé qué decir, porque con los únicos que puedo hablar es con gente que no me lo puede resolver. En realidad, no tiene mucha lógica esto de que no nos paguen o de que yo no pueda tener una cierta estabilidad o que no podamos hacer acuerdos de pagos parciales, pero es así”, afirmó.
Luego Claudia González, al consultarle sobre la posibilidad de que la situación obedezca a la decisión del Gobierno de la provincia, de construir un centro de rehabilitación, señaló que “la hipótesis podría llegar a ser, que sea por abrir el centro este grande de rehabilitación. Ese centro de rehabilitación va a recibir pacientes agudos y subagudos y hay que ver si puede, porque todavía no está abierto”, señaló.
Igualmente manifestó que “ellos no van a tomar pacientes crónicos, es decir ellos tienen una modalidad de trabajo en la cual el paciente con ACV o el paciente con Parkinson o el paciente con cualquier patología desmienilizante del sistema nervioso, tiene un tiempo de evolución y hasta ahí llega. Hoy en día con las neurociencias y con todo el trabajo que uno hace en lo neurocognitivo, sabemos que el paciente sigue siendo abordado desde las terapias y sigue avanzando. Es decir que no se ha presentado un problema grande, aún si fuera el problema de la apertura del centro de rehabilitación, tendría que ser algo hablado, tendrían que abonarme, tendría que haber propuesto que estos pacientes no queden hoy en día sin atención”, remarcó.
Finalmente señaló que “hoy en día es necesario trabajar privados y públicos en conjunto, siempre ha sido mixta la atención en la Argentina. Siempre se ha sostenido desde un lado o desde el otro. Se trabaja a veces distinto, se trabaja en distintos grupos de pacientes. Es decir que igualmente no entiendo, porque tampoco se han acercado a hablarme”, concluyó la responsable del CIKRU.