Las y los judiciales afiliadas y afiliados al mencionado gremio señalaron en un comunicado que “Desde nuestro sindicato (SEJUP), siempre denunciamos la gravedad institucional que provoca la falta de independencia entre los poderes del estado, ya que no sólo afecta las garantías de estabilidad y proyección de los empleados, sino que –además- impacta de manera directa en la resolución de los conflictos por los que los ciudadanos acuden al Poder Judicial”.
Después mencionan que “Las designaciones arbitrarias, el sostenimiento de jueces indecorosos (sospechados, denunciados, procesados); la pasividad del Consejo de la Magistratura, integrado en su mayoría por el poder político; sumado a las designaciones de personas emparentadas con el poder sin ninguna experiencia previa en la administración judicial; lleva a la institución a una crisis sin precedentes en su historia”.
Señalan, en ese texto, que “Más del 70% del presupuesto del Poder Judicial está destinado al pago de haberes de Funcionarios y Magistrados, lo que no se ve reflejado en la mejora del "servicio de justicia" para la sociedad fueguina. Esto sucede porque en la mayoría de las designaciones no prima el conocimiento y la trayectoria, sino la afinidad familiar o política”.
Más adelante expresan que “Ante el desconcierto, el silencio, la falta de acceso a la información pública, por quienes tienen la obligación institucional y moral de velar por el cumplimiento de las normas y la transparencia de los actos; hoy a una semana de un proceso electoral, las autoridades del Poder Judicial guardan silencio”.
Finalmente dicen que “Es por ello que con la intensión de no ser cómplices, decretamos el estado de alerta y movilización, hasta tanto el Superior Tribunal de Justicia dé respuesta a nuestros requerimientos. ¡La independencia de los poderes es responsabilidad de todos y todas!”, concluye el comunicado del SEJUP.