“Pasamos un trago amargo, porque estábamos plenamente confiados que la elección se ganaba y habíamos llegado muy bien juntándonos con la gente, agrupándonos y teníamos un pleno apoyo. Pero esto es así, el voto es democrático, y realmente no sabemos qué pasó porque teníamos la elección ganada y con los votos necesarios, pero a último momento nos encontramos con la sorpresa de que un voto fue para la comisión actual”, señaló Walter Hernández, delegado por la Asociación Obrera Textil, de la empresa Textil Río Grande.
Así se refería a los comicios desarrollados el jueves de la semana pasada, donde en las elecciones indirectas que se realizaron en la seccional se impuso el oficialismo por cuatro votos contra tres. Hernández dijo que fue “una sorpresa para todos y era lo que menos esperábamos”, aunque destacó que como oposición “hemos logrado mucho, porque no es poca cosa que después de más de 20 años de lista única se presente una lista opositora y se con sigan tres votos, de los siete que definen la conducción”.
Vale recordar que solo un delegado por cada comisión interna, de las siete fábricas que hay en la provincia, decide con su voto cuál será la lista que guiará los destinos de la seccional, sin participación directa de las afiliadas y los afiliados. El propio Hernández mencionó que “es engorroso, porque nuestro estatuto que no se ha modificado en más de 30 años y plantea que votan solo los secretarios Generales de cada cuerpo de Delegados, entonces son solo siete votos”, remarcó.
Finalmente, sobre la renovación que logró Roberto López para seguir al frente de la seccional, luego del periodo en el que reemplazo al depuesto Rogelio Sager, señaló que llamó al electo secretario General “para reconocer nuestra derrota y felicitarlo por su victoria, pero dejando bien en claro que vamos a seguir siendo lista opositora”, concluyó Walter Hernández.