La esposa del diputado Julio De Vido, quien se encuentra detenido luego que le quitaran los fueros, fue entrevistada el lunes pasado en el programa radial “Desde las Bases”, que se emite por Radio Universidad y Radio Provincia, dónde se refirió a la situación del exministro de Planificación Federal. En ese contacto aseguró la mujer que “la verdad es que todos los planteos judiciales que tiene Julio, o al menos los principales, están vinculados a su gestión como ministro de Planificación Federal durante 12 años, de 2003 a 2015, cuando estuvo en funciones con Néstor y con Cristina Kirchner”, repasó Alessandra “Lali” Minnicelli.
Después expresó que “las imputaciones que se le pretenden hacer, están vinculadas a su gestión política”, e indicó que “Julio está detenido por una causa que no tiene causa, es por haber firmado un convenio en el año 2008 con la Universidad Tecnológica Nacional. Un convenio que se firmó en el marco de una decisión estratégica que tenía el presidente Kirchner”, remarcó.
Recordó que De Vido perdió sus fueron por una votación en diputados “y después le tomaron declaración indagatoria, fue todo como a pedir de boca en un momento político particular cuando veníamos de las elecciones de medio término del 23 de octubre y el 26 se pidió el desafuero y la detención de De Vido, porque lo pidió (el presidente Mauricio) Macri concretamente”, aseveró.
Minnicelli consideró que “el Poder Ejecutivo maneja la justicia a través de (l fiscal Carlos) Stornelli. Todas las causas vinculadas a Julio y a la gestión política del gobierno kirchnerista, de los últimos 12 años, están administradas, manejadas y conducidas por el fiscal Stornelli”, remarcó.
Advirtiendo que existe “una decisión estratégica del presidente Macri de sacar de escena a Julio concretamente y de perseguir a Cristina Kirchner, esto es así de claro. Y quien pone operativa la persecución es Stornelli. Cuando Macri y su ministro de Justicia (Germán Garavano) dijeron: queremos preso a De Vido; el que salió corriendo a intentar la inhabilidad moral, que se planteó en el mes de octubre de 2017, fue el fiscal Starnelli con la doctora Carrió”, recordó.
Mencionando que la primera vez el intento “fracasó, porque Julio tuvo muchos votos a favor, pero a los pocos meses cambió la mano porque ellos habían ganado las elecciones de medio término. Estaba abierto el libro de pases, no me voy a cansar de decirlo, y había muchos de los propios que se estaban yendo y necesitaban alguien a quien hacer responsable de todos los males, el depositario de todas las cuestiones porque estaban todos extorsionados o carpeteados”, remarcó la esposa de Julio De Vido.
Más adelante se la consultó sobre las figuras de la exgobernadora Fabiana Ríos y de la actual mandataria Rosana Bertone, la primera en su momento denunciante de De Vido aunque luego durante su gestión supo reunirse y concretar acuerdos con el por entonces ministro y la segunda, también compañera de militancia del diputado detenido, muchas veces durante su paso por el Congreso de la Nación gestora ante el exministro de distintas cuestiones para la provincia.
Minnicelli respondió que “Julio fue ministro de Planificación y Federal, y esa área como estaba concebida por Néstor Kirchner en su plataforma electoral, era para el desarrollo productivo del país, para cubrir las asimetrías regionales y trabajar sobre la desigualdad entre las personas”. En ese marco dijo que Julio De Vido “apuntaló la gestión de la gobernadora Ríos con obras, por supuesto Rosana Bertone -que era del Frente para la Victoria- fue depositaria de la gestión política como legisladora en su momento, para mejorar la situación de Tierra del Fuego”. “Pero en esto no hay mezquindades políticas, cuando el desarrollo productivo del país es lo que está en juego”, advirtió. Asegurando que “Julio impulsó muchas obras en Tierra del Fuego, como lo hizo en Santa Cruz, como lo hizo en cada uno de los rincones del país dónde hacía falta infraestructura y servicios para el desarrollo”.
Alessandra Minnicelli dijo finalmente que el exministro de Planificación Federal lleva “520 días de una prisión preventiva absolutamente irregular” y advirtió que no tenía “ninguna posibilidad” de entorpecer la investigación, aceptando en su momento renunciar a todos los espacios de poder que podrían permitírselo. Mencionando que con la detención “pasó de estar trabajando 15 o 20 horas por día a nada, a estar ubicado en un lugar absolutamente inhóspito , porque si hay algo espantoso es la cárcel de Marcos Paz, que es una cárcel de máxima seguridad”. “Las condiciones en la que está Julio son infrahumanas, no son las condiciones de un preso político que es lo que es Julio”, manifestó por último.