Liliana Ibáñez, trabajadora del IPVyH quien junto con Sandra Aballay visibilizaron este tema; señaló que la medida “fortalece, pero igual me angustia porque me da la sensación que hay mucha gente que apoya y hay quienes también denuncian maltrato en sus lugares de trabajo. Pero también me angustia, porque lo cierto es que yo no quería estar en esta situación”.

Igualmente destacó “a todas las chicas que apoyan, porque son ellas las que organizaron la actividad, no fui yo”. Luego confirmó que la persona que es apuntada como responsable de malostratos y violencia laboral contra ellas, Horacio Alonso, les envió una carta documento “primero a Sandra Aballay, hace como una semana y media atrás, y el viernes pasado a mí, pidiéndome que me retracte de todo lo que dije”.

“Yo me pregunto ¿Cómo quiere que me retracte de algo que paso y que todo el mundo vio? Es como que él me presiona a mí y como si él fuera el agredido, no yo”, indicó Ibañez. Después, al ser consultada sobre la postura de la abogada que la representa, la Dra. Dalila Nora, manifestó: “ella me dijo que iría a ver el expediente en la Fiscalía y que esto va a seguir, porque está bien lo que estamos planteando”.

La trabajadora, como en otras oportunidades, señaló: “a mí me encanta mi trabajo, pero me pregunto ¿cómo vuelvo ahí? Si hoy me lo preguntan digo que no quiero volver a mi puesto de trabajo, porque esto me afectó y no tengo ganas de nada. Si la presidenta (Leticia Hernández) hubiera hecho lo que tenía que hacer o el Director de Recuperos hubiera hecho lo que tenía que hacer, no estaría ni yo, ni nadie en esta situación”.

Después aclaró “yo no pido que lo echen, ni nada por el estilo a Horacio Alonso, pido que haga un tratamiento psicológico y psiquiátrico como lo hago yo. Que haga lo que tiene que hacer y que lo aparten un tiempo, porque lo mío no son vacaciones ni nada por el estilo, porque estoy angustiada”, aseguró finalmente Liliana Ibañez.   

Vale señalar que, junto con la Colectiva Feminista, estuvieron integrantes de Las Rojas, el Nuevo MAS, Izquierda Socialista y la Lista Roja docente.

Foto: Matías Risso