La extensión por 15 años del sub régimen de promoción industrial fue decretada por el presidente de la Nación Alberto Fernández a finales de octubre del pasado, un año antes pero en el mismo mes, el Grupo Mirgor compró las firmas Brightstar Argentina y Brightstar Fueguina, adueñándose de la producción total de la producción de teléfonos marca Samsung. A partir del mes de enero de este año desvinculó por diversas razones, que van desde los “arreglos voluntarios o despidos encubiertos” hasta el despido sin causas, a alrededor de 50 operarios y operarias, entre los cuales se incluyó a la totalidad del cuerpo de delegados.

Lejos de cumplir con las garantías que habían firmado ante toda la Comisión para el Área Aduanera Especial (CAAE), en cuanto a la estabilidad laboral fijada en la complementación industrial; según sus declaraciones juradas de las 332 personas que se desempeñaban bajo la firma Brightstar Fueguina, durante el mes de enero, quedaron solo 267 a quienes a su vez le restaron el transporte y la comida que siempre fueron pagados por las fábricas -a cambio de una reducción de la jornada-, afectando personal de los servicios satélites y dejando en situación desigual las condiciones respecto al resto de las empresas.

Según se confirmó en las últimas semanas, en el Grupo Mirgor decidieron contratar personal y vienen realizando horas extras desde el comienzo del año -inclusive algunos días domingo-aumentando volúmenes de producción en su planta industrial que tiene frente a la rotonda de acceso al barrio Malvinas Argentinas (ex Chacra 13) y en la cual se desempeña casi la totalidad de quienes pertenecen a Brightstar Fueguina. Algo que hace tan solo dos meses atrás era absolutamente inviable, según este grupo empresarial que ocupó el podio entre las empresas fueguinas con mayor ganancia en los últimos años, compitiendo inclusive con algunas de las grandes empresas nacionales que se desempeñan en el mismo sector.

Este año, el contexto general para el sector empresarial que proyecta superar los más de 10 millones de celulares, 2,5 millones de televisores y los cerca de 1,3 millones de acondicionadores de aires -fabricados el año pasado- se encuentra atravesado por la necesidad de obtener dólares y aprobaciones para la compra de insumos, fijando sus expectativas en el acuerdo con el FMI y la rendición de los fondos verdes de las exportaciones del sector rural. Pero también está en conflicto con el sector gremial, luego del rechazo unánime de las asambleas a la propuesta que incluía el 45% de aumento para este año, apoyando la resolución del congreso de delegados de la UOM a la convocatoria a un paro total de actividades por 24 horas para este martes, comenzando a las 23 horas del día lunes.