

Durante un reportaje con FM La Isla, el tesorero de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) Río Grande, Marcos Linares, confirmó que las plantas de Iatec, Brightstar y Famar —todas del Grupo Mirgor— aplicarán suspensiones rotativas de una semana por mes hasta diciembre, ante la fuerte caída en la demanda de celulares.
“El martes pasado la empresa nos transmitió que las ventas han caído mucho más de lo esperado, prácticamente en todos los segmentos, pero sobre todo en celulares”, explicó Linares.
El dirigente señaló que la empresa había planteado inicialmente la posibilidad de dejar sin tareas a 200 trabajadores, alternativa que fue rechazada de plano por el gremio. Tras la negociación, se arribó a un acuerdo que contempla suspensiones generales con la garantía de percibir el 100% de los haberes, sin afectar aguinaldo, premios ni adicionales.
“Hemos llegado a un acuerdo que contempla que los trabajadores terminen percibiendo el 100% de los haberes. Esperamos que esta situación venga a contener a la totalidad de los trabajadores y ver si se revierte en algún punto la situación de consumo, aunque no somos lo optimistas que nos gustaría ser”, subrayó.
Consumo desplomado
Para Linares, el problema excede la competencia con los productos importados y se explica en el derrumbe del poder adquisitivo de la población.
“Hoy gran parte de los habitantes de este país están comiendo en cuotas. Si la comida se compra en cuotas, cualquier bien de uso pasa a ser de segundo o tercer orden. Eso es lo que está sucediendo en prácticamente todos los sectores productivos”, afirmó.
El sindicalista remarcó que la situación no solo afecta a la industria electrónica fueguina, sino también a empresas de alimentos tradicionales: “Lo vemos en firmas como La Serenísima, que también atraviesan una situación compleja. La caída del consumo es generalizada y golpea de lleno a todo el aparato productivo”.
Autopartes bajo presión
Consultado sobre la actividad de autopartes del grupo, Linares confirmó que Mirgor recibió una nota de Toyota —su principal cliente— manifestando preocupación por eventuales medidas de fuerza que afecten su esquema de producción “just in time”.
“Nuestra intención no es generar conflictos, pero tampoco vamos a agachar la cabeza. Vamos a seguir defendiendo tres ejes fundamentales: la industria nacional, los puestos de trabajo y el derecho soberano a seguir habitando Tierra del Fuego”, enfatizó.
Un futuro incierto
El acuerdo de suspensiones regirá hasta el 31 de diciembre y garantiza la continuidad laboral, aunque desde la UOM advierten que el panorama económico sigue siendo incierto.
“Indudablemente esto oscurece el panorama de aquí al 15 de enero”, admitió Linares, aunque sostuvo que mantienen expectativas de que las mesas de negociación con el sector empresarial y el Gobierno permitan encontrar soluciones que fortalezcan a la industria local frente a las importaciones.