

Trabajadores del Sanatorio Fueguino, nucleados en el gremio de la sanidad ATSA, realizaron una nueva protesta la semana pasada, en las puertas del establecimiento ubicado en el barrio Mutual de Río Grande. La medida responde a demoras reiteradas en el pago de salarios y aguinaldos, y a la ausencia de respuestas por parte de la administración del sanatorio.
Claudia Etchepare, secretaria General de ATSA, explicó a los medios de prensa que “la situación del sanatorio cada vez se está empeorando más” y denunció que no se ha abonado el sueldo completo del mes de mayo, ni el aguinaldo correspondiente a diciembre de 2024. “Tampoco se pagó el bono de sanidad. Los compañeros están cansados de esperar y exigen una respuesta clara sobre el futuro de este sanatorio”, sostuvo la sindicalista.
Según detalló, los trabajadores están cobrando sus haberes en hasta tres cuotas mensuales: el 50% al cuarto día hábil, un 25% a los diez días y el restante 25% en función del ingreso de fondos. “Esto ya lleva más de 13 meses así, y el sueldo prácticamente se fracciona como si fuera en cuotas”, denunció Etchepare.
A la problemática salarial se suma la incertidumbre sobre el futuro de la institución. “Había trascendido que existía un oferente interesado en tomar el sanatorio, pero extraoficialmente sabemos que eso se cayó”, indicó.
La dirigente también confirmó que fue convocada a una audiencia en la Secretaría de Trabajo para este martes 17 (por hoy), tras una presentación formal del gremio. Mientras tanto, el personal sanitario decidió manifestarse una hora en la vía pública para visibilizar el conflicto.
Por otro lado, Etchepare advirtió sobre una posible afectación en la atención médica, y recordó que el sanatorio mantiene una deuda con el Hospital Regional Río Grande. En ese marco, planteó dudas sobre los aportes descontados a los afiliados metalúrgicos: “Extraoficialmente sabemos que la directora del hospital denunció que hay una deuda importante, y no está claro si las obras sociales están recibiendo lo que se descuenta”.
Finalmente, Etchepare hizo un llamado a la comunidad: “Así como los compañeros metalúrgicos pelean por su salario, nuestros trabajadores también merecen cobrar por su trabajo. El sanatorio es necesario para la población, pero los trabajadores también necesitan una respuesta urgente”.