En un reporte publicado ayer, la petrolera británica Rockhopper Exploration plc; como ella misma se define: “con intereses clave en la Cuenca del Norte de las Malvinas”; dio a conocer “sus resultados no auditados para los seis meses (de 2024), finalizados el 30 de junio de 2024”.

Es la empresa que en 2010 adquirió a los kelpers, violando la legislación argentina; una licencia de exploración petrolera al norte del archipiélago, y donde halló un yacimiento de clase mundial al que bautizaron con el nombre de Sea Lion o León Marino. Y tal cual lo viene anunciando desde 2023, lo comenzarán a explotar en 2025 luego de haberse asociado con la israelí Navitas, quien sumó una cifra cercana a los u$s 1000 millones, para garantizar su desarrollo, previendo perforar en una primera etapa, 23 pozos y extraer en el termino de 8 años, 312 millones de barriles de petróleo.

Por el volumen de su monumental despojo, la auspiciosa declaración oficial de Rockhopper, es totalmente contraria a los intereses argentinos. Por un lado, porque expresa contar con un yacimiento que certifica una cantidad en el orden de los 791 millones de barriles de petróleo; dato nuevo suministrado por la compañía, quien hasta el año pasado reconocía tan solo la existencia de 580 millones de barriles de petróleo; y por otro lado, porque prevé obtener en ese período (8 años), ingresos brutos por un monto de u$s 4.000 millones brutos y dejar regalías el gobierno usurpador, en el orden de los u$s 77 millones.

VPN (Valor Presente Neto) del primer desarrollo de 312 mmbbls - US$4.000 millones brutos para la empresa conjunta antes de impuestos y después de regalías del Gobierno de las Islas Malvinas de US$77 Brent.

 “Acogemos con satisfacción la noticia, anunciada el 24 de septiembre”

En su reporte empresarial, el director ejecutivo de la petrolera Samuel Moody, se hace lugar para festejar el compromiso diplomático del pasado martes 24, entre la canciller argentina Diana Mondino y el ministro de Relaciones Exteriores del Reino Unido David Lammy; que reestablece los objetivos a favor de la colonia implantada en Malvinas a través del Acuerdo Foradori-Duncan de la era macrista.

“Rockhopper está en su mejor posición desde hace algún tiempo. La monetización del premio ofrece una mayor flexibilidad financiera y permite a la empresa centrarse en el avance de Sea Lion hacia la aprobación, que sigue siendo nuestro objetivo principal. También acogemos con satisfacción la noticia, anunciada el 24 de septiembre, de un nuevo acuerdo general de cooperación entre las Malvinas y Argentina.

“Quiero agradecer a nuestro equipo por su continuo compromiso para impulsar el progreso en Rockhopper y a nuestros accionistas (Navitas) por su continuo apoyo en este momento emocionante para el Grupo”; manifiesta Samuel Moody.

Fuente: Agenda Malvinas