Delegados y delegadas de la Asociación Trabajadores del Estado y de la Unión Personal Civil de la Nación, junto con integrantes de la agrupación feminista Las Rojas y el Nuevo MAS, realizaron un escrache esta mañana dirigido a Horacio Carlos Alonso; quien fue apuntado por Liliana Ibañez y Sandra Aballay; dos empleadas que se encuentran de licencia y con atención psicológica y psiquiátrica, a raíz de haber sido víctimas de acoso laboral y violencia por parte de Alonso; según denunciaron oportunamente.

En el escrache hubo serias imputaciones contra Alonso, quien en las últimas horas fue trasladado de área y ya no se desempeña en el sector de Recupero de Créditos y Seguimiento de Morosidad; sino en la Dirección de Compras y Contrataciones. Pero, como advirtieron quienes se manifestaron esta mañana, eso lo mueve “solamente a 20 metros del lugar donde deberían trabajar las compañeras, si volvieran, y además lo premian porque estará viaticando unas tres veces por semana cuando tenga que viajar a Ushuaia”.

Adriana Blanco, integrante de Las Rojas, señaló que se hicieron presentes en el lugar “para denunciar la violencia que sufre la compañera Liliana y la compañera Sandra, por parte suya, y que llevó a que las compañeras estén con licencia psiquiátrica”, dijo enfrentando a Alonso, quien se encontraba sentado en su nuevo lugar de trabajo.   

Pero además advirtió que “estas dos compañeras no son las únicas que sufren su violencia” y aseguró que, frente a los hechos denunciados, “la presidenta del IPVyH no ha hecho nada”. Reclamó la “separación del cargo con goce de haberes, porque no nos metemos con el salario del trabajador ni vamos a victimizar a su familia, pero estamos reclamando su separación del cargo, lo mismo para la presidenta del IPVyH, para su asesora y todos los directores, porque no sirven, ya que están permitiendo que pase lo que pasó”.  Lo acusó de ser un “psicópata” que “elige sus víctimas”, asegurando que le pedirán “al propio gobernador (Gustavo Melella), su separación del cargo”. Luego lo trató de “cobarde, canalla y crápula, porque no tiene nombre lo que hizo”.

A su turno María Sepúlveda, delegada por la Asociación Trabajadores del Estado, relató que se trata “de dos casos, de dos compañeras, que están con tratamiento psicológico por haber sido maltratadas, acosadas y perseguidas por su propio Director. Lo que queremos, es que a este señor se lo remueva del cargo, que lo saquen de la institución; para que a nuestras compañeras le puedan dar el alta y que puedan recuperar su lugar de trabajo”.

“No queremos a las compañeras afuera, las queremos adentro como a todo trabajador”, remarcó la delegada. Además dijo que no ven bien el cambio de área dentro del IPVyH, “porque en este lugar, donde lo designaron ahora, esta persona va a tener viáticos, un lugar muy tranquilo y estará mucho más cómodo que dónde estaba. La idea es que lo remuevan a un lugar donde solo haya hombres y que ejerza allí sus funciones, porque él no está como para estar al frente de un lugar dónde haya compañeras, ya ataca permanentemente o está todo el tiempo con miradas amenazantes”, describió Sepulveda.