“Hemos decidido, como Centro Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata, poner el énfasis y la energía en la presentación ante la Corte Suprema. Porque nos jugamos mucho, las víctimas se juegan mucho, por eso es que más allá de que no compartimos el criterio y el temperamento, entendemos que es un momento para enfocar la energía en esa cuestión”, indicó Jerónimo Guerrero Iraola, abogado del CECIM La Plata, refiriéndose a la situación planteada luego que el juzgado Federal de Río Grande informó, el último lunes, sobre la suspensión de las diez nuevas indagatorias previstas para junio y julio, en el marco de la causa que investiga presuntos delitos de Lesa Humanidad sufridos por los soldados argentinos durante de la guerra de Malvinas, a manos de sus propios oficiales y suboficiales.

Vale recordar que la medida tiene anclaje en el fallo de la Cámara de Casación Penal que la semana pasada avaló la presentación que la defensa de uno de los militares acusados, y que revocó el fallo de la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia. Cámara de Casación que, sin pronunciarse sobre el delito invocado, reiteró que los delitos señalados están prescriptos.   

Guerrero Iraola aclaró que, más allá del fallo de la Cámara de Casación, en el marco de la causa que viene llevando adelante la jueza Mariel Borruto de Río Grande “los testimonios están, es importante todo lo que ha sucedido. Recordemos que hay tres personas con procesamiento confirmado, ha pasado mucha agua bajo el puente y es sumamente importante y vital remarcar que –si bien este es un escollo más- no tenemos dudas desde el Centro Ex Combatientes Islas Malvinas La Plata, que la única salida posible a esta cuestión es la justicia”.

En ese mismo sentido, pidió “que primen los estándares internacionales de promoción y protección de los Derechos Humanos, que se respete la Constitución y los convenios internacionales de Derechos Humanos”. Indicó que “es una cuestión de tiempo”, asegurando que saben “que todo esto que ha sucedido, los procesamientos, todos los hechos significativos que se han dado en esta causa; tienen muchísimo que ver con el obrar del CECIM, con esta vocación inclaudicable de dar testimonio aún en contextos adversos, y no nos cabe duda que hacia el final del camino encontraremos un criterio que tenga que ver con lo que realmente sucedió”.

Aseguró que no se habla de “hechos que no existieron, inventos o estas cuestiones que muchas veces algunos de los artífices de las torturas intentan instalar. Acá estamos hablando de torturas, de hechos que fueron torturas, estamos hablando de más 120 víctimas, de 105 casos de tortura probados, de 95 militares denunciados. Existe un deber inclaudicable e impostergable del Estado de investigar y, desde esa perspectiva, sabemos que lo imposible solo tarda un poco más y no tenemos dudas de que esto va a terminar en un proceso de investigación y eventual juzgamiento a los artífices de las torturas en Malvinas”, sentenció.

Después, al ser consultado sobre los plazos que se pueden manejar cuando la causa llegue a la Corte, reconoció que sería hacer “futurología” pero admitió que esperan “que se pueda resolver lo antes posible y de la forma más adecuada a los estándares vigentes. No estamos pidiendo que inventen la pólvora, ni que digan algo contrario a derecho; estamos pidiendo ni más ni menos que apliquen el derecho vigente, el derecho aplicable, el derecho que corresponde. En ese sentido, no tenemos dudas que a la larga triunfaremos”, remarcó.

El abogado Jerónimo Iraola recordó también que tienen “abierto un proceso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, dónde pedimos que declare la responsabilidad del Estado argentino”. Señaló que se trata de una instancia importante y volvió sobre la necesidad de lograr celeridad, dado que la causa “lleva 14 años de tránsito, hasta ahora sin hechos significativos, más allá de los procesamientos y entendemos que debe ser priorizada en el tratamiento judicial”, concluyó.