El día del metalúrgico, en plena pandemia, transcurrió sin las tradicionales convocatorias en la provincia y en el marco de diferentes reclamos y con distintas situaciones en los dos parques industriales fueguinos. Mientras en la zona norte, dónde el salario de un trabajador ingresante duplica a uno de Ushuaia, los reclamos están relacionados con las condiciones de empleo y la mejora de algunas conquistas; en la capital fueguina se teme por los puestos de trabajo de Ambassador y es creciente el malestar con la conducción gremial.

También la dinámica en cuanto al número de puestos de trabajo es bien diferente; en Río Grande hubo un crecimiento de casi 1300 puestos laborales comparando los datos del pasado mes de junio con junio de 2019. Sin embargo al revisar los datos que se tienen de ese mismo mes en la ciudad de Ushuaia, se perdieron unos 130 puestos de trabajo, con una población total en el sector fabril inferior. En ese sentido hay que decir que Río Grande contaba en junio con 5637 trabajadores en las empresas electrónicas y autopartistas, mientras en Ushuaia se desempeñaban 1651 trabajadores en ese mismo mes.

Sin dudas el contexto aporta a los reclamos, mientras algunas empresas intentan avanzar con una suerte de “flexibilización”. Así es el caso de la firma IATEC, en donde decidieron cambiar la modalidad contractual pasando de plazo fijo a eventual, a cerca de 800 operarios quienes -en su mayoría- vienen siendo contratados desde hace años.

Esta legal pero precaria condición laboral, resurgida en varias empresas; permite que en caso de darse una nueva etapa de cuarentena los empresarios puedan dejar en la calle a todos los contratados, finalizando la relación laboral sin recibir algún tipo de indemnización. En el caso de IATEC, parte del Grupo empresarial Mirgor, desde la Comisión Interna denunciaron que se pretende “avanzar contra los derechos obreros, persiguiendo a delegados mediante la justicia y amenazando al gobierno con despidos masivos”.

Por esta razón los representantes gremiales de IATEC impulsaron un plan de lucha que incluyó la manifestación permanente en las puertas y portones de la planta industrial, “luego con el aval de todos los trabajadores comenzamos con una medida de una hora por turno. Si la empresa no está dispuesta a resolver estos tres puntos que están en discusión, profundizaremos las medidas” expresó esta semana Ángel Gordillo, delegado en ésta empresa y secretario de Organización de la UOM.

Estas medidas llevaron a que el Ministerio de Trabajo de Nación interviniera dictando la conciliación obligatoria a partir del viernes, la cual luego de un intenso debate se decidió finalmente acatarla, centrando la atención en lo que pueda determinarse de las negociaciones y el rol que juegue la cartera laboral.

Dentro del “paquete” de reclamos que tienen los trabajadores metalúrgicos de todo el parque industrial en Río Grande, se destaca el pedido de efectivización de la totalidad del personal de prestación discontinua (PPD); y el pago de un “monto anual” que se debe negociar año tras año por cada empresa de forma individual y que ayuda a recomponer la canasta alimentaria.

En BGH el reclamo de los trabajadores, si bien es similar al resto, se le agrega el pedido del pago del 100% sobre los días de suspensiones. En este caso, el sector empresarial en su totalidad decidió acogerse al acuerdo celebrado por la UOM a nivel nacional y pagó el 86% de bolsillo, sobre los 24 días en que los trabajadores estuvieron suspendidos en el mes de agosto. Luego de medidas de fuerza que incluyeron varias horas de asambleas, esta discusión se encuentra transitando la conciliación obligatoria desde el pasado miércoles por el plazo de 15 días con una primera audiencia virtual que se llevó a cabo el jueves pasado a las 15 horas.

Con esta medida el ministerio intima al sindicato a dejar sin efecto, durante el período de conciliación, toda medida de acción directa; prestando labores de manera normal y habitual. Asimismo al sector empresarial se lo obliga a que se abstenga de tomar represalias de cualquier tipo con el personal representado por las entidades sindicales, garantizando las mismas condiciones que al comienzo del conflicto.

Otro establecimiento fabril que podría profundizar las medidas de fuerza en esta semana, es el caso del Grupo Radio Victoria Fueguina, fabricante de las firmas electrónicas Hitachi, TCL y RCA. Los obreros metalúrgicos, encabezados por el cuerpo de delegados, mantienen allí un solo reclamo: la efectivización de los 29 trabajadores PPD que vienen cerca de 10 años en esta modalidad y que la empresa debió efectivizar producto de acuerdos internos incumplidos.

En Río Grande el tema salarial, al menos momentáneamente, parece haber quedado relegado con un promedio de sueldo de 78 mil pesos en bruto y cerca de 73 mil de bolsillo, para un operario que recién ingresa.  Habiendo logrado una importante recuperación con el último acuerdo definido en paritarias, dejándolos en mucho mejor posición que sus pares de Ushuaia.

Ushuaia en otra situación

En la capital provincial es otra la situación, con una postergación importante en materia salarial que implica un salario ingresante que ronda el 50% del que tienen los metalúrgicos riograndenses y la obligación de tener que ascender tres categorías para alcanzar a sus colegas del norte provincial.

También hubo un leve retroceso en el número de mano de obra ocupada, mientras en junio de 2019 había 1782 operarios, en junio del corriente ese número descendió a 1651. Con fuentes de empleo en peligro cierto, tal como sucede con la empresa Ambassador Fueguina, que se encuentra sin producir y tiene una importante deuda con sus trabajadoras y trabajadores.

Días atrás Sandra Ragusa, trabajadora de Ambassador Fueguina y representante de sus compañeros, dijo que le piden “encarecidamente al gobernador que pueda intervenir o que pueda accionar, ya que es la máxima autoridad, para que pronto podamos trabajar y que no se caiga la propuesta que tenemos de BGH o alguna otra que pueda ir apareciendo”.

“Somos  57 familias las que estamos esperando esta posibilidad y te digo que en la mayoría de los casos hay mucha desesperación, pudimos charlar con compañeros que están en un estado desesperante económicamente”, aseguró la operaria días atrás, en diálogo con FM Master´s.

Como en ocasiones anteriores, la trabajadora volvió a cuestionar el rol que tiene la UOM Seccional Ushuaia en este tema y comparó a los dirigentes metalúrgicos de la capital con el representante de la patronal, asegurando que “Pablo Hadjes, (el secretario General Héctor) Tapia y (el secretario Gremial) Castronuovo son la misma persona; entonces hoy sabemos y creemos que él no asistió a la reunión porque no estaba la UOM presente”, dijo refiriéndose al último encuentro convocado en la Legislatura.

Remarcando que “a él le da respaldo la UOM, mientras a nosotros el gremio nos soltó la mano desde el día uno. Nosotros no vamos a negociar con la UOM, para nosotros nuestro garante o nuestro intermediario en las negociaciones con Pablo Hadjes es el gobernador y no nos vamos a mover de esa postura”; remarcó finalmente la trabajadora de Ambassador.

Vale señalar, finalmente, que la estabilidad laboral es uno de los temas a resolver en ambos casos y la prórroga del Subrégimen de Promoción Industrial se presenta como el gran desafío para toda la provincia.